¡Todos podemos pintar!

He notado que cada vez que algún cliente quiere iniciar un nuevo proyecto de pintura se llena de dudas e inseguridades, aun cuando es un proceso que, de no gustarnos podemos cambiarlo, sé que cambiarlo lleva un gasto en dinero y tiempo, sin embargo, debemos pensar que es donde llegamos a dormir y nos levantamos todos los días, donde pasamos nuestro fin de semana y recibimos a nuestros amigos, y aunque no vayas por la vida tratando de impresionar a los demás, te aconsejo que a través del color y decoración en tu casa, reafirmes tu personalidad y gusto por la vida.

He atendido client@s que deciden por colores vibrantes por que sufren de depresión y no les gustan los colores claros, y que, pese a que yo personalmente no erigiría un naranja fuego para mi recámara, hay quien lo necesita y es completamente válido, muchos otros se basan en imágenes de referencia, y son colores neutros y fríos que, aunque los muebles y decoración en las habitaciones no son iguales, ayudan a generar esa sensación de calma y elegancia que el cliente está buscando, todo es válido a la hora de elegir un color para nuestros espacios, solo debemos ser fieles a nuestros gustos.

Cuando hay parejas eligiendo colores las cosas se complican, las mujeres generalmente buscan belleza y variedad, ellos practicidad, si bien el blanco es la mejor solución para estos casos, combinarlo con otros colores en una que otra pared, resulta ser la mejor opción, ya que ceder pintar totalmente una casa de un color que no nos guste puede generar problemas a largo plazo, si esto ocurre mientras el cliente elige su color, opto por mostrarle colores más neutros que pueden gustarle a los dos sin caer en el clásico beige o crema, colores que no pasan de moda, pero que hay más variantes que resultan ser atractivas y divertidas.

 

 

 

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